Entre los guisos y platillos tradicionales de otoño está la calabaza en tacha, un plato dulce hecho a base de este fruto, piloncillo y canela.
El Fideicomiso de Riesgo Compartido dice que la calabaza de castilla fue domesticada en el suroeste de los Estados Unidos, México y Guatemala; son plantas básicamente anuales que pertenecen a la familia de la sandía, el melón, el pepino, el chayote, el estropajo para baño, los acocotes, bules, calabazos, entre otros. Son de gran diversidad en tamaños, formas y coloración (en frutos) y tamaños, en sus semillas.
En México, las variedades y razas nativas se cultivan prácticamente en todas las regiones agrícolas, acompañando al maíz y al frijol en el agroecosistema que denominamos milpa.
Cada región tiene su propia manera de prepararla, pero por lo general se cocina en un jarabe de piloncillo con ramas de canela para darle un delicioso toque de sabor. La calabaza en tacha se puede preparar también con especias, como clavos o anís estrella, las cuales le imprimen detalles que agradece el paladar; además, se puede combinar con guayabas, caña de azúcar, naranjas e incluso higos, ya que todo es de temporada.
RECETA TRADICIONAL
INGREDIENTES
1 calabaza pequeña (2 kilos aproximadamente).
600 gramos de piloncillo.
1 raja de canela.
2 litros de agua.
MODO DE PREPARACIÓN
Calentar hasta hervir el agua en una olla profunda, incorporar la canela y dejar hervir a fuego medio por un par de minutos. Agregar el piloncillo, hasta que se deshaga por completo y se forme una especie de jarabe.
Incorporar la calabaza en trozos (Cortados al gusto) y cocer a fuego medio hasta que este suave y melosa, aproximadamente de 40 a 50 minutos.
PRODUCCIÓN
Michoacán es el estado líder productor de la calabaza de castilla con 7 mil 725 toneladas anuales.